«El SUMMA 112, además de furgonetas y sirenas, es asistencia, docencia, investigación, calidad… Esto permite estar en el lugar donde el paciente te necesite, en su domicilio o en cualquier otro lugar. Desde el Centro Coordinador respondemos y acudimos. Es un privilegio entrar en las vidas de tantas personas y poder ayudarles con unos grandes profesionales, con gran vocación de servicio, altamente cualificados y que llenan de corazón las ambulancias con sirenas que nos llevan al lado del paciente». Así define la enfermera Patricia Fernán Pérez el trabajo que realizan en el servicio de urgencias de la Comunidad de Madrid. Su director de enfermería es José Luis Pérez Olmo. Desde que asumió esta responsabilidad, en 2018, está implementando profundos cambios y mejoras en el trabajo de las enfermeras, con el apoyo de su director gerente, Pablo Busca. «Todos los proyectos están basados en la ordenación de la estructura, que es algo importantísimo para mí. Son innovaciones para transformar, para dar mayor competencia y más capacidad a las enfermeras de coordinación en la toma de decisiones, pues creo que son puntales clave para el buen funcionamiento de la organización. Nos encontramos en un círculo virtuoso de la salud y esto tenemos que aprovecharlo para que ocurran cosas, en base a nuestras vivencias como profesionales, con una visión a medio y largo plazo», subraya José Luis. Con esta declaración de intenciones de José Luis queremos explorar la presencia de las enfermeras en servicios innovadores como el SVAE, la atención al paciente, las enfermeras de coordinación o la farmacia; o en funciones tan relevantes como la supervisión de guardia, la investigación o la calidad. Todo ello, está configurando un modelo único de enfermería extrahospitalaria.
José Luis Pérez, director de Enfermería del SUMMA 112:
«Debemos asumir nuestra responsabilidad profesional dentro de nuestro marco jurídico y competencial, tomando las riendas de nuestro futuro»
Por su repercusión para la profesión, comenzamos por el Soporte Vital Avanzado Enfermero, SVAE. «Fue una gran novedad, con mucho impacto. Supuso muchas horas de trabajo, con la intención de generar seguridad en el entorno de la toma de decisiones. Su puesta en marcha está asociada a procedimientos fruto de más de 300 horas de trabajo con equipos multidisciplinares y con la implementación de plataformas tecnológicas para apoyar pruebas diagnósticas como los electrocardiogramas o la indicación de medicamentos vía telefónica», explica José Luis. Todos los procedimientos operativos están recogidos en un documento denominado ‘Isabel Zendal’, como homenaje a esta figura histórica de la enfermería. El proyecto se convirtió en realidad en noviembre de 2018, con dos SVAE, integradas por una enfermera y dos técnicos de emergencias.
Javier Álvarez Bernardos es uno de los enfermeros que forma parte del SVAE: «A nivel profesional he crecido bastante. Yo tenía un bagaje asistencial importante y esta nueva experiencia me ha permitido ser más independiente y tener una visión diferente del equipo, siempre teniendo clara que nuestra función sigue siendo la de cuidar, que es lo que define a la ciencia enfermera. Estamos conectados con el centro coordinador, de forma que cuando necesitamos apoyo médico lo tenemos a nuestra disposición, en función de las características de cada operativo. Una parte de nuestro trabajo es autónomo y otra interdependiente con otros profesionales». Así, el trabajo de los dos técnicos de emergencias sanitarias tiene una gran importancia, como subraya Cristina Matesanz Maroto. «Si ya en una uvi móvil son relevantes, en el SVAE son fundamentales como apoyo a la labor enfermera. Tu trabajo tiene que ser corto en el tiempo y eficaz, resolviendo conflictos con capacidad analítica. Tienes que ser ágil en la toma de decisiones. Nuestra función es desliar la madeja. Llegas, te encuentras una situación que está liada y la resuelves».
Cristina Matesanz, enfermera SVAE del SUMMA 112:
«Entre nuestras competencias destacan la toma de decisiones ágil para resolver conflictos y la capacidad analítica»
Desde el SVAE dan respuesta a todo tipo de situaciones. «Sencillamente, recibes avisos y atiendes a pacientes», explica Cristina. «Por ejemplo, en mi última guardia: Resolvimos una hipoglucemia. Hablamos con el médico y la persona pudo quedarse en su casa». Entre las funciones de la unidad destacan los traslados interhospitalarios o el transporte neonatal. «Es uno de los aspectos más apasionantes. Vamos con un equipo especializado, con una neonatóloga y un técnico especializado en neonatos. Es muy bonito».
Las enfermeras del SVAE también integran la mesa de enfermería del SUMMA 112, ubicada en los centros coordinadores, de la calle Antracita, en Madrid, y Madrid 112 de Pozuelo de Alarcón. Compaginan ambas labores. «La vinculación con el centro coordinador nos da una visión más holística del conjunto del servicio», explica Javier Álvarez. «Nos encargamos de la coordinación de los pacientes críticos de la Comunidad de Madrid, las alertas hospitalarias, la capacidad de reacción de las diferentes unidades… Cuando recibimos una llamada, buscamos la respuesta más adecuada según la clínica, las características del paciente y la localización del incidente».
Javier Álvarez, enfermero coordinador del SUMMA 112-SVAE
«La combinación de gestión y asistencia nos permite tener una visión holística del servicio»
Supervisoras de guardia
La implantación de la jefatura de supervisión de guardia es otra de las iniciativas de la dirección de enfermería. En agosto de 2019, se incorporaron los primeros seis supervisores. «Es un proyecto vinculado con la organización para mejorar la calidad asistencial», afirma José Luis Pérez Olmo. «Es la primera vez que un servicio de emergencias extrahospitalarias desarrolla una supervisión de enfermería en este ámbito y dentro del Sistema Nacional de Salud. Hasta entonces, éramos 500 enfermeras sin una interlocución intermedia con la dirección. Ahí es donde se enmarca nuestra labor», explica Verónica Real Martínez, una de las supervisoras. «Está resultando muy divertido, entre comillas, pues colaboramos con la gestión del equipo directivo y estamos al tanto de la asistencia. De hecho, en caso de necesidad, si requieren el soporte de un segundo equipo para un paciente de alta complejidad, somos nosotras las que intervenimos».
Verónica Real, directora de enfermería del Hospital del IFEMA:
«Cuando no existe tratamiento específico, el cuidado facilita la mejoría de las personas»
‘Cercalidad’ fue el nombre de la propuesta de supervisión presentada por Cristino del Campo Cazallas. «Es una mezcla de cercanía y calidad», nos dice su autor. «La supervisión es una apuesta por la zona de valor que son los profesionales, que están en los distintos recursos y responden a los servicios. Así es como yo entiendo la gestión. Nuestra función es poner a su disposición todo lo necesario para que lleven a cabo su trabajo con la mayor calidad posible». Uno de los problemas a los que tratan de responder es a la dispersión de los profesionales, algo inherente a las características del SUMMA 112, con unidades distribuidas por toda la Comunidad de Madrid. «Estamos en contacto continuo con los jefes de guardia, la gerencia y las direcciones. Vamos tomando decisiones lo más colegiadas posible y tratamos de visitar a los profesionales en sus puestos para conocer sus necesidades, transmitir sus ideas y conectarlos unos a otros. Ese es nuestro objetivo: acercarlos a todos, pues en la dinámica del día a día y los turnos a veces un enfermero puede pasar meses sin ver a otro compañero. Nosotros contribuimos a acortar esa distancia».
Cristino del Campo, supervisor de guardia del SUMMA 112:
«Lo peor de una crisis es no aprender de ella. Ojalá, cuando termine, hayamos sido capaces de innovar y salir con nuevas enseñanzas»
Investigación enfermera
El talento humano «es uno de los grandes valores del SUMMA 112», subraya José Luis Pérez Olmo. «En la apuesta por su desarrollo hemos implementado funciones de responsabilidad de las enfermeras en ámbitos como la formación, la investigación, la calidad o la atención al paciente». De esta premisa parte la integración de Elena Pastor Benito en el departamento de Investigación y Formación, al que llegó en julio de 2019. «Junto a mi labor asistencial, siempre he estado vinculada con la docencia. Son dos aspectos que deberían ir de la mano. con lo que la incorporación de una enfermera a esta área supone un avance para nosotras, para nuestro reconocimiento y para el trabajo conjunto con otros profesionales». Colaborando con un coordinador médico y un equipo de técnicos de emergencias y administrativos, Elena promueve planes de formación continuada e investigación y coordina las rotaciones MIR o EIR, tanto de la Comunidad de Madrid como de otras regiones, de instituciones privadas o colaboraciones con otras administraciones como ayuntamientos.
La acreditación de todas las formaciones, la mejora de la financiación de las investigaciones y las facilidades para compaginar asistencia e investigación son sus grandes retos. «Hemos hecho un gran esfuerzo para virtualizar todas las formaciones y no suspenderlas debido a la covid-19. Potenciamos la formación en metodología de la investigación para las enfermeras; lideramos cada vez más proyectos, también de ámbito europeo, y nuestras publicaciones científicas ya forman parte del repositorio institucional del SERMAS. Todo ello, en colaboración con otros departamentos como el de Calidad», enumera Elena.
Elena Pastor, enfermera del departamento de Investigación y Formación del SUMMA 112:
«En investigación y formación, como enfermeras tenemos la oportunidad de impulsar a otras enfermeras»
Enfermera de calidad
La enfermera del departamento de Calidad es Patricia Fernán Pérez, en esta función desde 2017, trabajando en colaboración directa con la coordinadora médica de esta área. «Entre ambas tenemos una visión global de la asistencia. Como enfermera, enriquezco los procedimientos e instrucciones técnicas y esto nos permite disminuir el error, que es uno de los objetivos de los procesos de calidad», explica. «Llevamos a cabo una gestión de riesgos de forma proactiva, con análisis modales de fallos y efectos, de los principales procesos o códigos tiempo dependientes como código trauma, sepsis, ictus… en los que desglosamos todo lo que puede salir mal antes de implantar cualquier cambio. Nuestro objetivo final es caminar siempre hacia la excelencia». Para lograrlo, cuentan con numerosos sistemas de acreditación y gestión relacionados con los recursos materiales y con los procesos asistenciales, así como distintas comisiones multidisciplinares sobre seguridad del paciente, humanización, dolor, responsabilidad social socio-sanitaria… «Es un trabajo transversal, muy vivo, en el que aprovecho todos los conocimientos que tengo como enfermera y la visión global de la organización».
Patricia Fernán, enfermera del departamento de Calidad del SUMMA 112:
«La enfermera de calidad tiene una visión global de la organización que permite impulsar cambios para mejorar»
Servicio de Farmacia
En todos los procesos de calidad y resultados de la auditoría, una de las fortalezas suele ser el Departamento de Esterilización. De ello se encarga el servicio de Farmacia, ubicado en la sede de Getafe. Aquí trabaja la enfermera Izaskun Prieto Barrio, junto con una farmacéutica y ocho técnicos en cuidados auxiliares de enfermería. «Es un servicio poco conocido que desarrolla un trabajo impresionante. Desde aquí, tenemos centralizada la gestión y en todo momento sabemos los consumos y gastos de medicamentos, el estocaje necesario, el material y los equipos esterilizados. Es parecido a una farmacia hospitalaria, con la diferencia de que tenemos que hacer llegar los recursos a unidades que están en diferentes localizaciones geográficas a lo largo de toda la Comunidad de Madrid», subraya Izaskun. «Nosotros contribuimos a que todos los servicios funcionen correctamente. Como vengo de la asistencia, soy consciente de la importancia de resolver los problemas del día a día lo antes posible». En esta labor son importantes los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería, responsables del mantenimiento y reposición de medicamentos, mochilas, carros de parada, vehículos, equipos de catástrofes… «Somos la referencia para resolver cualquier incidencia y aportamos tranquilidad a los compañeros», explica Nieves Sebastián Poza, TCAE de logística. «Nunca había hecho este trabajo y estoy encantada, porque realmente compruebas que ayudas al correcto funcionamiento de todo». Además, gestionan los antídotos para todos los hospitales de la región, una de las funciones asumidas por el SUMMA 112 para el conjunto del sistema sanitario madrileño.
Izaskun Prieto, enfermera del servicio de Farmacia del SUMMA 112:
«Desde Farmacia nos adelantamos a las necesidades de los compañeros para que todo funcione correctamente»
Nieves Sebastián, TCAE del servicio de Farmacia:
«Es muy gratificante que los compañeros cuenten con nosotros para resolver sus problemas. Nosotros tratamos de transmitir tranquilidad»
Atención al paciente
El destino final de todo el dispositivo es la excelencia en la atención del paciente. De garantizarla se encargan enfermeras como Cristina Díaz Pérez, jefe de servicio de Atención al Usuario desde mayo de 2018 y especialista en derecho sanitario. «Tramitamos y respondemos todas las reclamaciones, dando una explicación a lo sucedido, pidiendo disculpas si es necesario y emprendiendo medidas cuando detectamos fallos, notificándolos al departamento correspondiente. Es un proceso totalmente transparente para el usuario. La mayoría de quejas suelen ser por percepciones vinculadas con el retraso en la respuesta, si bien habitualmente la damos en menos de quince minutos. Es verdad que cuando se produce una emergencia vital este tiempo puede resultar eterno para un familiar». Cristina trabaja con un equipo de cinco administrativos y un facultativo médico. «Son muy buenos. Tienen un trato telefónico excelente, pues la mayoría de las consultas se producen por teléfono. Para mí, liderar este departamento es un privilegio».
Cristina Díaz, enfermera jefe del Servicio de Atención al Usuario:
«El trabajo en equipo en la atención del paciente es la mejor garantía de transparencia y calidad para el usuario»
Hasta aquí los proyectos consolidados, como lo es también el departamento de catástrofes. Para el futuro, la dirección de enfermería ya trabaja en otras propuestas como el método Manchester para el triaje telefónico. Con todas estas iniciativas José Luis Pérez Olmo quiere marcar la diferencia.
Una cita conocida de la artista Barbara Januszkiewicz dice que el pensamiento creativo inspira las ideas y estas, a su vez, el cambio. «Debemos asumir nuestra responsabilidad como profesionales de la salud, dentro de nuestro marco jurídico y competencial, tomando las riendas de nuestro futuro. Las actuales circunstancias son una oportunidad de adaptación para asumir nuevos retos. En nuestro caso, tenemos que reclamar la especialidad de emergencias. Esto nos permitirá un mayor reconocimiento por parte de todos, incluidas las administraciones», concluye José Luis.
Un servicio con una fuerte capacidad de adaptación
Una de las principales características del SUMMA 112 es su capacidad de adaptación a cualquier situación y a las demandas de la sociedad, con posibilidad de responder a las necesidades de cualquier nivel de asistencia. Así ha quedado demostrado con la actual pandemia.
El 20 de marzo de 2020, la dirección del SUMMA 112 comunicó a Verónica Real Martínez que se haría cargo de la dirección de enfermería del hospital de campaña instalado en IFEMA. «El 21, por la noche, comenzaron a llegar los primeros pacientes. Al principio tu labor es más de hacer que de programar. Comienzas a atender a los primeros 800 pacientes que llegaron al pabellón habilitado para ello y a coordinar el montaje de otros dos pabellones más. Fuimos poniendo en marcha todo desde cero, formando a las supervisoras, seleccionando al personal…», recuerda. «Los sentimientos iban variando conforme pasaban los días. Cuando recibes la noticia de que vas a ser la directora de enfermería, se mezclan el miedo y la responsabilidad de estar a la altura para que todo salga bien. También sientes orgullo porque cuentan contigo para esta función, sabiendo los grandes compañeros con los que trabajas; porque sabes que los ciudadanos te necesitan y que trabajas por y para ellos; y porque estás abanderando a la enfermería en un momento complejo. Fueron unas semanas de intensísimo trabajo, sin pausa, recorriendo más de 20 kilómetros al día por los espacios tan enormes de IFEMA. En unos días convertimos pabellones fríos y grises en un hospital al servicio de los ciudadanos, con espacios abiertos que permitían la comunicación con las compañeras y el cuidado de los pacientes cuando empeoraban. Al principio, no teníamos medios y nos las ingeniábamos como podíamos, pero poco a poco fueron llegando los recursos necesarios para que todo funcionara como en un hospital. Gestionamos todo con mucha complicidad y apoyo entre los compañeros. Era acción-reacción. Encontrabas el problema y le dabas solución».
El SUMMA 112 fue un pilar fundamental en la gestión de la primera ola de la covid-19, apoyando el hospital de campaña y reorientando todos sus servicios, apoyando los traslados entre hospitales, a las residencias de ancianos, albergues… coordinando la realización de test PCR o, ahora, gestionando el incremento de casos a través del centro de llamadas específico sobre coronavirus. «Es emocionante ver cómo trabajan y cómo gestionan la ansiedad que la situación les genera», subraya Cristino del Campo.
Al cerrar servicios como los SUAP (Servicio de Urgencias de Atención Primaria), su personal se ha integrado en otras unidades, como le ha ocurrido a la enfermera Yaincoa Pérez Barba, quien primero estuvo en el hospital de IFEMA y ahora lleva a cabo asistencia domiciliaria. «Es un servicio especial con vehículos propios que ha permitido doblar nuestra capacidad, con la que realizamos toda la atención programada en los domicilios, curas, paliativos, PCR… Trabajamos una enfermera y un técnico de emergencias y vamos realizando todos los avisos que van surgiendo. Está funcionando muy bien y las personas nos reciben con mucho agradecimiento. Están muy asustadas y aprovechamos el tiempo que estamos junto a ellas para tranquilizarlas y para realizar educación para la salud. Es un servicio que sirve para resolver muchas urgencias. Es una pena que no sea conocido, porque serviría para reducir la saturación de los hospitales».
Yaincoa Pérez, enfermera de la Unidad de Atención Domiciliaria del SUMMA 112:
«Estamos demostrando una alta capacidad de adaptación para responder a las necesidades de la sociedad»
A modo de conclusión, Yaincoa destaca que la enfermería se ha ido adaptando a todo: «Primero, fuimos al IFEMA. Luego, regresamos a las unidades móviles, lideramos el centro de llamadas… Y así seguirá siendo». Como directora de enfermería del IFEMA y en representación de la enfermería, Verónica recogió el Premio Princesa de Asturias de la Concordia a los profesionales sanitarios. De su experiencia con la covid-19 afirma: “Si teníamos alguna duda de que el pilar de los hospitales y de la sanidad está en torno a la enfermería, esta pandemia lo ha terminado de demostrar. La esencia de la enfermería, el cuidado, está siendo imprescindible. Esta enfermedad lo ha dejado claro. Cuando los tratamientos no están claros, el cuidado y la calidad de la atención han sido importantes para la mejoría de las personas. E igualmente la parte social, con los pacientes aislados sin ver a sus familias, nos las hemos ingeniado para que el contacto humano no les faltase».
Libros que salvan vidas
En el podcast ‘Sanará Mañana’ de Frecuencia Enfermera hemos entrevistado a Ana María Ruiz, enfermera del SUMMA 112. Es autora de ‘Libros que salvan vidas. Una biblioteca de campaña en tiempos de pandemia’, obra ganadora del premio Feel Good 2020. En la conversación hablamos con ella sobre la gestación de una biblioteca móvil del IFEMA, galardonada con el premio Antonio Sancha de la asociación de editores de Madrid, que proporcionó compañía, consuelo, distracción y entretenimiento a las personas allí atendidas. Todas estas experiencias las ha reflejado también en su relato escrito.