“La salud es belleza y la más perfecta salud es la más perfecta belleza”. Esta cita del poeta inglés William Shenstone ejemplifica la filosofía del trabajo de la clínica de medicina estética ‘Kaliany, salud y belleza’, que toma su nombre de la diosa hindú de la belleza. En esta empresa tiene una participación relevante la enfermera María Ángeles Arias Dorado, junto a Agustín de la Quintana Villegas, licenciado en Ledicina y Cirugía y experto en Medicina Estética, Ginecoestética y Medicina Regenerativa.
La labor de Mª Ángeles se centra en el cuidado de la piel y la imagen corporal, cuidados derivados de la cirugía y la medicina estética íntima de la mujer. Es un campo donde la enfermería tiene muchas posibilidades de desarrollo. “Siempre he visto que en el ámbito de la salud íntima y la estética faltaba la parte de los cuidados y así comenzamos a trabajar”, explica. “Es importante la preparación de la piel antes de cualquier intervención así como los cuidados postoperatorios, por ejemplo, de una liposucción, con los consejos dietéticos, el ejercicio físico, los drenajes… En todos los casos la preparación y el seguimiento posterior a la operación así como el apoyo psicológico del paciente forman parte de mis funciones”.
“Siempre he visto que en el ámbito de la salud y la estética faltaba la parte de los cuidados y así comencé a trabajar como enfermera en este ámbito. La medicina estética es un medio de prevención”, comenta María Ángeles Arias Dorado, enfermera y propietaria de la clínica ‘Kaliany, salud y belleza’.
Con una larga experiencia en este campo, hace tres años, abrieron su primera clínica en Alcalá de Henares, donde ofrecen múltiples servicios de estética facial y corporal, ginecoestética, dermocosmética o diferentes cirugías. “Como enfermera tengo mis propios tratamientos relacionados con el cuidado de la piel, con consejos dermocosméticos, valoración y estudios de la piel con cuestiones relacionadas con la hidratación, la nutrición, etc.”. Para María Ángeles, “la medicina estética no hay que verla como un lujo, sino como un medio de prevención para un buen envejecimiento o corregir o mejorar determinadas imperfecciones como cicatrices en la cara o problemas de acné. En este último caso, podemos reducir el impacto negativo que tiene en los adolescentes a nivel psicológico y emocional. A veces ocurre que los niños no quieren salir de casa. Cuando mejoras su imagen consigues que retomen su vida normal y en este proceso las enfermeras tenemos mucho que decir. Esto es algo muy importante y que te reconforta como profesional de la salud”, concluye María Ángeles.
Mucho trabajo de estudio
Junto al día a día en la clínica de estética, la enfermera Mª Ángeles Arias Dorado ha mejorado su formación en estas cuestiones. “Siempre he tenido que estudiar. Me he hecho especialista en cuidados de la piel y en prevención del envejecimiento cutáneo, por la Universidad de Alcalá de Henares. Igualmente, me he formado en cuidados dermoestéticos y cuidados de la piel en el paciente oncológico. Son conocimientos en los que te vas actualizando conforme van surgiendo las distintas necesidades. El cuidado de la piel es un mundo muy nuevo para las enfermeras, y tienes que estar en constante formación”, señala.
El trabajo dermocosmético con pacientes oncológicos
Una de las líneas de trabajo que María Ángeles Arias Dorado va a implementar en su clínica es la dermocosmética oncológica. “Me he puesto en contacto con asociaciones de lucha contra el cáncer con el fin de enfocar todo de manera correcta, especialmente con el cáncer de mama. Cuando se recibe radioterapia o quimioterapia hay cuidados de la piel que son muy específicos para estas situaciones. Es importante enseñar el tipo de cremas adecuadas a cada tratamiento, el uso del maquillaje, la micropigmentación para reconstrucción de la areola y los cuidados del pelo… Es un campo muy amplio, donde las enfermeras tenemos muchas cosas que hacer y que decir”, explica María Ángeles. “Por ejemplo, el consejo dermocosmético y los productos que pueden utilizar para mejorar su imagen. Esto se me ocurrió tras hablar con una voluntaria del centro en el que trabajo, el Hospital Universitario del Henares de Madrid. Es auxiliar de vuelo y viene como voluntaria para enseñar a las mujeres a maquillarse. Me comentó que que tienen muchos problemas cuando van a los establecimientos habituales de este tipo de productos, porque no se sienten seguras y no entienden sus necesidades. Sin embargo, cuando reciben los consejos por parte de una enfermera aumenta su seguridad y confianza, pues están recibiendo un cuidado de profesional especialista. Nosotras sabemos qué técnicas y productos podemos emplear y cuáles no. Queremos profundizar en este sentido. A nivel de laboratorio ya se está avanzando en España, con cremas específicas y productos que cubren las necesidades de las personas con cáncer”, adelanta María Ángeles Arias Dorado.