Empoderamiento es uno de los términos con los que Isabel González, enfermera e integrante del grupo de formación de la UCI Pediátrica del Hospital Materno-Infantil Gregorio Marañón, define su experiencia en los Premios Enfermería en Desarrollo 2022. El equipo que representa fue ganador en la categoría ‘Premio Pascual a la promoción del autocuidado’. La iniciativa ‘Niño dependiente de tecnología: preparando a las familias para ir a casa’ se llevó la aclamación del jurado y se materializó en el acto de entrega celebrado el pasado mes de noviembre en el Teatro Real de Madrid.
Ahora, y con la preparación de la nueva edición de los premios, Enfermería en Desarrollo ha querido conocer el balance que ha hecho Isabel de su experiencia.
Si quieres participar en los Premios ED 2023, ya puedes enviar tu candidatura cumplimentando el formulario de inscripción, previa consulta de las bases. ¡Apúntate!
Conoce el proyecto: ‘Niño dependiente de tecnología: preparando a las familias para ir a casa’
Tradicionalmente, los niños dependientes de tecnología, por la complejidad de sus cuidados, presentaban una dependencia del centro hospitalario durante largos periodos de tiempo, lo que les impedía realizar una vida acorde a su edad cronológica, afectando a su calidad de vida. Formar a las familias en unos cuidados seguros es el objetivo para fomentar un alta temprana.
Los pacientes pediátricos, a cuyas familias va dirigida esta formación, son niños dependientes de ventilación (invasiva / no invasiva), con derivaciones intestinales, nutrición a través de vías artificiales o monitorización específica al haber sufrido situaciones de compromiso vital. La metodología didáctica utilizada abarca un soporte teórico (manual adaptado para familias y vídeos sobre cada materia), un soporte práctico realizado con un maniquí, prácticas supervisadas de los cuidados y la resolución de complicaciones mediante simulación avanzada. Se ha realizado la formación a siete familias en los últimos quince meses. Estas familias han sido entrenadas y formadas en cuidados especializados de forma precoz. Como conclusión, la formación a las familias para la vuelta a casa de forma segura supone la incorporación del paciente pediátrico a una vida más acorde a su edad y un incremento en la calidad de vida familiar.