‘Consulta abierta’ es el nombre del espacio que la enfermera Leonor Monserrat tiene desde hace diez años en dos centros de enseñanza secundaria en Cataluña, gracias al programa ‘Salut i Escola’, creado en 2004 por los departamentos de Salud y Educación de la Generalitat. La iniciativa acerca a los estudiantes de enseñanza secundaria al sistema sanitario a través de la enfermera.
Leonor tiene su consulta de pediatría en Arenys de Mar. Cada lunes se desplaza, de manera alternativa, al instituto ‘Els Tres Turons’ en esta misma localidad, y Domènec Perramon, en Arenys de Munt. En total, tiene a su cargo cerca de 1.000 alumnos.
“El alumno me puede ver para cualquier problema o situación que tenga. Puede venir derivado por la dirección o el profesorado o bien por los padres que me llaman o me vienen a ver si están preocupados. Siempre en total anonimato. Lo que hablamos queda entre el alumno y yo, a menos que sea algo que lo comprometa para su salud y su desarrollo como persona. Según el caso, también hablamos con los padres para tratar el problema que ocupa”.
“El futuro de la comunidad está en las escuelas. Es allí donde las enfermeras debemos realizar nuestras actividades de prevención y promoción de la salud”.
El programa trabaja cuatro campos de actuación: salud afectivo-sexual, salud mental, salud alimentaria y consumo de alcohol, tabaco y otras drogas. Con su trabajo, Leonor se ha convertido en un referente para toda la comunidad educativa, estudiantes, profesores y padres. “Es una manera de que vengan a verme. Los profesores me llaman cuando detectan un problema para preguntarme cómo afrontarlo. Muchas veces me quedo a tomar café con los padres, fuera del horario escolar y los alumnos me tienen a su disposición en cualquier momento”, explica Leonor Monserrat.
“Mi trabajo en los institutos me gusta muchísimo. Es la Comunitaria por excelencia. Acabo de cumplir 60 años y para algunos soy la abuela, la consultora cuando tienen problemas. Conmigo encuentran una persona que les escucha. Si viene un joven que ha reincidido, por ejemplo si le ha fallado el preservativo en dos ocasiones, jamás le pido explicaciones ni le digo qué ha hecho, sino que vuelvo a trabajar con él la educación y la prevención”, concluye.
Cuarenta años de experiencia
Leonor Monserrat trabaja como enfermera pediátrica desde hace cuarenta años en el ‘Institut Catalá de la Salut’, en hospitales como el Vall d’Hebron y en Atención Primaria, primero en Mataró, su localidad natal, y en la actualidad en el CAP de Arenys de Mar. Además, lleva trabajando en las escuelas, de manera voluntaria, más de veinte años, “haciendo charlas de alimentación, entre otras actividades. También vacunando en las escuelas dentro del programa de salud escolar”. Desde su experiencia, afirma “El futuro de la comunidad está en las escuelas, es donde tenemos que hacer más actividades de prevención y promoción de la salud, en lugar de esperar que los pacientes vengan a vernos a nosotras”.
Colaboración institucional
Otro de los secretos del trabajo de Leonor es la colaboración que encuentra en otras administraciones. “Los ayuntamientos son pequeños. Yo conozco al alcalde y a los regidores y podemos hacer muchas cosas como el taller de primeros auxilios, con el que llevamos cinco años, gracias a la colaboración de Cruz Roja y de la Diputación de Barcelona”. Además, también cuenta con el apoyo de los servicios sociales de cada municipio y de la policía local y los Mossos de Escuadra, entre otras instituciones.
Iniciativas pioneras
Al inicio de cada curso, Leonor planifica las actividades que va a realizar durante el año. Siempre está preparando iniciativas distintas. “Intento traer a personajes mediáticos. Hace dos años trajimos a los institutos a la cocinera Carme Ruscadella, del restaurante Sant Pau en Sant Pol de Mar. Es una chef importante y habló a los alumnos de la importancia de comer bien y de que esto no guarda ninguna relación con estar gordo o no. Se puede tener una figura estupenda haciendo ejercicio y comiendo bien”.
Implicación y apoyo
La enfermera Leonor Montserrat destaca el apoyo y la implicación que recibe por parte de todo el equipo profesional de su centro de salud. “Varias compañeras enfermeras imparten talleres de desayuno en Primero de ESO. Las comadronas hacen talleres de sexualidad y anticonceptivos en Tercero y Cuarto de ESO. Los médicos llevan las actividades relacionadas con el alcohol, el tabaco y otras drogas y forman a los propios profesores para que prevengan el consumo de tabaco entre sus alumnos”. El taller de autoestima, dirigido a estudiantes de Segundo de ESO es otra de las iniciativas destacadas. “Abordamos los trastornos de alimentación, los problemas de seguridad en uno mismo que comienzan a tener cuando fracasan en sus primeras relaciones sentimentales, así como las dificultades de relación con padres y compañeros. Si detectamos un caso de acoso lo ponemos en conocimiento de la dirección para solucionarlo”.